Apenas se supo de la tragedia provocada por el incendio en la madrugada del 8 de diciembre pasado, numerosos agentes pastorales, consagrados y laicos, se hicieron presentes en el lugar para mitigar en parte el dolor de los familiares de los 81 internos que perecieron. Es as铆 como llegaron el Padre Gerardo Ouisse, p谩rroco de la parroquia San Cayetano de la Legua; el Vicario de la Zona Sur, Padre Miguel Hobban, y el Padre Alfonso Baeza, entre otros.
El capell谩n nacional de Gendarmer铆a, Padre Jaime Nawrath, estaba en Antofagasta, visitando recintos penales de esa zona, cuando se enter贸 el incendio. De inmediato regres贸 a Santiago y se dirigi贸 a la c谩rcel afectada, donde convers贸 con los internos, personal de prisiones y los familiares de los reos. 鈥淰er los muertos y todo eso fue algo escalofriante鈥, confiesa.
A帽ade que 鈥渓o que pas贸 es un problema nacional Yo creo que todos debemos hacer un 鈥渕ea culpa鈥 y preguntarnos cu谩l podr铆a ser nuestro aporte. Porque seguir construyendo c谩rceles no soluciona el problema de la delincuencia. Hay que prevenir. Hoy d铆a la familia est谩 destruida, entonces los ni帽os se est谩n criando pr谩cticamente marginados de toda posibilidad de educaci贸n. El tema es muy complejo, pero todos tenemos que ponernos en marcha y hacer nuestro aporte鈥.
El Padre Nawrath record贸 la propuesta de indulto de la Iglesia Cat贸lica, en la que planteaba liberar a determinados reos, siempre que no estuvieran involucrados en hechos de sangre, como los primerizos, enfermos terminales y autores de delitos menores.
Abocarse al tema de fondo
Por su parte, el Padre Marcelo Mancilla, capell谩n metropolitano de Gendarmer铆a, qued贸 impactado por la visi贸n de los cuerpos de los reos quemados. 鈥淐uando t煤 miras los cuerpos de las personas, tan j贸venes, que est谩n ah铆, a un metro tuyo y, a la vez, tan lejos鈥 me sent铆 tan in煤til ante esa realidad. Pero s铆 puedes hacer una oraci贸n, celebrar la eucarist铆a por ellos. Tambi茅n hay que hacer algo por los que est谩n vivos鈥.
Enterado de la noticia se fue a la unidad de San Miguel, donde acompa帽贸 al Cardenal Err谩zuriz en su vista al recinto carcelario. Destaca la situaci贸n del personal, 鈥渁l que le toc贸 vivir esa situaci贸n tan dura鈥.
Agrega el Padre Mancilla que 鈥渟iento una pena muy grande. Las decisiones que se est谩n tomando est谩n un poco lejanas de las urgencias que hoy d铆a tenemos. Estamos todav铆a preocupados de lo que no es urgente. Si estamos sobrepoblados, para qu茅 les vamos a repartir colchones y camas si no tenemos d贸nde poner a la gente. Siento que estamos poniendo la mirada donde no hay que mirar, tomando medidas que no van a resolver el problema鈥.
Afirma que hay que apuntar a la infraestructura, a un personal adecuado para la cantidad de internos y al mismo sistema carcelario. Hay que implementar medidas alternativas de pena que sean efectivas. Hay gente encarcelada por puras leseras, que son delitos, pero que no merecen c谩rcel. Con eso lo 煤nico que hacemos es criminalizar m谩s a nuestra juventud鈥.
La Palabra de Dios da sentido a sus vidas
Carlos Hidalgo, casado, consultor inform谩tico, forma parte de un equipo de catequistas que est谩 evangelizando en la c谩rcel de San Miguel. Asegura que la palabra que entregan los reos la acogen 鈥渃on mucha seriedad鈥. Agrega que los internos 鈥渟e ven duros, firmes, pero la mayor铆a se quiebra cuando les tocamos temas sensibles para ellos. Hacen muchas preguntas. Son gente que est谩 muy abierta a escuchar la Palabra de Dios鈥. Dice Carlos Hidalgo que en la c谩rcel 鈥渉ay una necesidad grande, real, no s贸lo de reinsertarse en el mundo laboral, sino de un cambio en sus vidas, de algo que les d茅 vuelta el sin sentido con que viven. Son personas que est谩n con una necesidad incre铆ble de recibir afecto, cari帽o, y de encontrar un sentido a sus vidas鈥.
Respecto del apoyo que ha dado el Cardenal Francisco Javier Err谩zuriz a las catequesis en los recintos penales, se帽ala que 鈥渁hora con mayor raz贸n. De los que murieron, ojal谩 que algunos de ellos hayan sido de los que escucharon el kerygma que les anunciamos 鈥揾ay uno que yo s茅 que s铆 lo escuch贸- y que se hayan ido con ese mensaje, que Dios los ama鈥.
Cambiar el coraz贸n de piedra
Nancy Vel谩squez, virgen consagrada, que conoce la realidad carcelaria de Chile, envi贸 un e-mail a sus contactos el pasado mi茅rcoles 8 de diciembre, en el que relata la experiencia vivida ese d铆a: 鈥淗oy a las 8:00 A.M. me enter茅 de la tragedia de la c谩rcel de San Miguel. Una fuerza impresionante me empujo a dejar mi casa y mi proyecto para el d铆a y partir a ponerme al servicio de los hermanos que sufren. Hoy, d铆a de la Inmaculada, le dije a Mar铆a Virgen: 鈥楺ue mi misa de hoy sea contigo y all铆鈥 (...) Al llegar a las afueras del penal cerca de mil de personas y un silencio impresionante. Nada mas acercarme a las puertas del penal vi mujeres tan angustiadas, madres, esposas, hijas. Pongo 茅nfasis en el g茅nero es que como mujer comprend铆 instant谩neamente el dolor de mis hermanas鈥.
Luego agrega: 鈥淢ientras rez谩bamos con las familias tambi茅n lo hac铆a por el capell谩n de la Unidad. Intu铆 que el estaba siendo testigo ocular de esta tragedia al interior del penal.
Le ped铆 a Dios que le d茅 fuerza. Que sintiera que est谩bamos ah铆 con 茅l. M谩s tarde me alegro saber que el Cardenal tambi茅n estuvo ah铆. Se帽or no permitas que se nos transforme en piedra el coraz贸n, permite que los que lean este mail tambi茅n escuchen tu voz y dejen sus casas y sean tu instrumento de paz鈥.
Fuente DOP www.iglesiadesantiago.cl
Santiago, 09-12-2010