El 8 de marzo de 2011 se celebra internacionalmente el 100º aniversario del DÃa Internacional de la Mujer, cuyo tema para este 2011 es «La igualdad de acceso a la educación, la capacitación y la ciencia y la tecnologÃa: Camino hacia el trabajo decente para la mujer», reconocido por las Naciones Unidas como un dÃa en que se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en igualdad con el hombre, en la sociedad y en la búsqueda de su desarrollo integral como persona.
Es, por tanto, más que un hito, la conmemoración de un proceso que ha tenido diversas manifestaciones a lo largo de la historia para hacer presente en toda la sociedad el reconocimiento a los derechos de las mujeres pero también al reconocimiento de su aporte al desarrollo de la humanidad.
Según el último informe de Desarrollo Humano presentado por el PNUD el 2010, durante las últimas décadas Chile ha vivido cambios profundos, culturales, polÃticos y de polÃticas públicas, que han resultado en un mayor grado de igualdad para hombres y mujeres. A nivel de opinión se percibe que la desigualdad es menor que antes…
Sin embargo, la misma institución se pregunta dónde están los lÃmites a una igualdad de derechos y de trato en la sociedad para hombres y mujeres y constata que las causas son múltiples y complejas; que se enraÃzan en nuestras costumbres y formas de relacionarnos entre hombres y mujeres, porque cualquier cambio en la situación en la sociedad de unos afecta a los otros. El llamado, entonces, es a mirarnos en relación y darnos cuenta de lo que hace que las mujeres en nuestro paÃs, nuestra ciudad, nuestra comunidad de trabajo o de vecindad, nuestra casa no se sientan necesariamente consideradas en sus necesidades y reconocidas en sus aportes.
Nuestro paÃs ha hecho avances en temáticas laborales pero cuesta reconocer el desgaste de las mujeres que, aparte de su trabajo remunerado, asumen cada dÃa el trabajo doméstico del cuidado de la familia; o no vemos el trabajo invisible de madres, hijas, abuelas que asumen con paciencia y amor infinito la responsabilidad de cuidar a los más pequeños o a los más ancianos de las familias.
Entre el 8 de marzo de 2010 y este 8 de marzo, 43 mujeres de nuestro paÃs fueron vÃctimas de femicidios. Ellas fueron vÃctimas de una cultura que no las supo reconocer y valorar. Que este 8 de marzo sea un momento para recordarlas y comprometerse como sociedad con ellas y con sus hijos para que situaciones como las que vivieron sean tan sólo un recuerdo de un tiempo de barbarie.
Como Pastoral Social Caritas queremos saludar a las mujeres que desde todos los rincones del paÃs trabajan solidariamente en sus comunidades, sin su mirada nuestra labor de servicio de la solidaridad y la justicia no llegarÃa a tantos lugares. Saludamos a las mujeres jefas de hogar que asumen el rol de padre y madre y pedimos para ellas condiciones de trabajo que les permitan mantener a sus familias y cumplir su rol sin temores…
Llamamos a toda la sociedad a buscar las palabras que no segregan ni invisibilizan; los chistes que no hieren; el gesto que no amenaza… A reconocer con afecto y con fuerza que las mujeres son un aporte a la vida de la familia, las comunidades y la sociedad en su conjunto. A anunciar que la vida será mejor, para hombres y mujeres en cuanto avancemos a relaciones más humanas, más cercanas, más afectivas.
Fuente: Comunicaciones Pastoral Social Caritas
Santiago, 08-03-2011