Periodista y portavoz de la CECh en camino al Diaconado Permanente

Periodista y portavoz de la CECh en camino al Diaconado Permanente

En una eucaristía presidida por el Obispo Presidente de la Pastoral de Comunicadores, Mons. Cristián Contreras Villaroel, se celebró el rito de admisión del periodista Jaime Coiro, vocero de la Conferencia Episcopal, como candidato al Diaconado Permanente.

 
Sábado 17 de Diciembre de 2011
La ceremonia se celebró en la parroquia La Natividad del Señor, en La Reina, y a ella asistieron, además de la familia y amigos del profesional, periodistas y comunicadores, matrimonios en formación al Diaconado Permanente, profesores, padres y alumnos del Colegio San Ignacio, religiosos, diáconos y sacerdotes.

En el rito de admisión, tras la consulta del Obispo a Jaime Coiro, a su esposa, Nilda Quezada, y a sus hijos Mateo (10) y Bruno (5), se bendijo el alba con que la familia revistió al ahora candidato al Diaconado.

En su homilía, Mons. Cristián Contreras destacó que Dios escoge misteriosamente a las personas y son éstas las que tienen que discernir dicho llamado, ya que Dios nunca deja de llamar. Además, el obispo encomendó a Jaime Coiro que hiciera suya la palabra de Pablo sobre la importancia de anunciar a Jesucristo porque si no se hace, estaremos muertos en vida. Finalmente, lo llamó a "echar las redes" de la reconciliación y del diálogo en un país donde, a veces, nos cuesta entendernos.

Tras encomendar su caminar a la Virgen María, Coiro dirigió un breve saludo en que agradeció la copiosa bendición de Dios manifestada en su vida, y pidió oración perseverante para que él, su matrimonio y la Iglesia toda “busquemos en todo amar y servir”.

Los diáconos permanentes son hombres casados que han recibido el sacramento del Orden Sagrado y que sirven a la Iglesia y la comunidad en el ministerio de la liturgia, de la palabra y de la caridad, a imagen de Cristo Servidor. Pueden conferir el sacramento del Bautismo y bendecir el Matrimonio, proclamar el Evangelio y decir la homilía en la misa, presidir celebraciones y la oración de los fieles, administrar diversos sacramentales, presidir el rito de los funerales y sepultura, entre otros servicios.

El rito de admisión es un hito dentro del proceso formativo para el Diaconado. En esta ceremonia, el aspirante manifiesta públicamente su voluntad de ofrecerse a Dios y a la Iglesia para ejercer el orden sagrado; y la Iglesia, por su parte, al recibir este ofrecimiento, lo elige y lo llama para que se prepare a recibir el ministerio, admitiéndolo como “candidato al Diaconado”.

Fuente: Comunicaciones CECh y DOP Iglesia de Santiago
Santiago, 17-12-2011
Video: Momentos de la eucaristía de rito de admisión