Iglesia presentó encíclica del papa Francisco sobre medio ambiente
“El bien ecológico es inseparable del bien común”, así lo afirmó el arzobispo de Santiago y presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, cardenal Ricardo Ezzati, al presentar la encíclica del papa Francisco sobre el “cuidado de la Casa Común” y materias ecológicas, “Laudato si” (Alabado seas).
En la presentación, participaron también el director de la Pastoral Social Caritas Chile, Lorenzo Figueroa, y la hermana Cristina Hoar, de la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (CONFERRE).
El Cardenal Ezzati inició su presentación leyendo el “Cántico al hermano Sol”, poesía de san Francisco de Asís escrita en 1225, con el cual el papa Francisco comienza su Encíclica.
Luego destacó algunos de los puntos más relevantes de la carta de seis capítulos presentada este jueves 18 de junio en el Vaticano: “La ecología se refiere justamente al cuidado de la casa común, que es al mismo tiempo una hermana con la que compartimos la existencia y que al mismo tiempo es una madre bella que nos acoge entre sus brazos “, la cual clama por el daño que le hemos provocado a causa del uso irresponsable de ella, señaló.
Según el presidente de la Conferencia Episcopal, “el llamado concreto que el Papa nos propone es el desafío urgente de proteger la Casa Común, que incluye la preocupación de unir toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo humano sustentable e integral. Otro desafío es el de colaborar para construir nuestra Casa Común, un objetivo transversal en el cual todos tenemos responsabilidad, lo que implica colaborar con otros organismos sociales”, puntualizó.
El cardenal Ezzati señaló que a través de su encíclica “Laudato si”, el Papa “Invita a un diálogo urgente sobre el modo como estamos construyendo el futuro del planeta. Espera que su carta ayude a reconocer la grandeza, la urgencia y la hermosura del desafío de trabajar para que nuestra hermana y madre tierra sea el espacio en el cual toda persona pueda desarrollarse a la altura de la dignidad humana”.
Otro punto importante a destacar es la relación íntima que existe entre los pobres y la fragilidad del planeta: “No es casualidad que los pobres habiten en los lugares más desheredados, que vivan en las periferias más abandonadas. Esta preocupación sobre la tierra va estrechamente ligada a los más vulnerables. Lo que invita a buscar otros modelos de la economía y de progreso y a revisar cómo lo medimos y cómo lo entendemos, en relación a calidad de la vida humana”, dijo el arzobispo de Santiago.
Finalmente, el presidente de la CECh concluyó resaltando la importancia de educar a la sociedad y las futuras generaciones, ya que el “bien ecológico es inseparable del bien común”, manifestó.
Es posible un cambio
En tanto, el Director de la Pastoral Social Caritas Chile, sociólogo Lorenzo Figueroa, manifestó que “estamos ante la existencia de una crisis ecologica global, multidimensional que es responsabilidad de todos. Ante esto, la encíclica viene a reforzar y estimular un compromiso distinto, un nuevo estilo de vida con este sentido de urgencia y esperanza pero con materias que de cierta manera ya se venían realizando”.
Lorenzo Figueroa destacó el vínculo entre lo ambiental y lo social que revela la encíclica. "Es muy claro cuando se señala que hay una correspondencia entre la degradación ambiental y la social. De ahí la invitación a la ecología integral que incluye la preocupación por revisar temas como pobreza y exclusión junto a lo medioambiental como dimensiones del mismo fenómeno, incluyendo el tema del trabajo. La necesidad de defender un trabajo decente y digno es parte de esta preocupación por la ecología humana e integral. Acentuar el desarrollo humano integral por sobre el actual estilo imperante de obtener ganancias a cualquier costo”, expresó.
Caritas es un organismo presente en más de 162 países y en esa perspectiva la Asamblea General realizada en mayo, elaboró su marco estratégico de trabajo para los próximos cuatro años escuchando el llamado del Papa, bajo lema “Una Familia Humana, al Cuidado de la Creación”. Como miembros de la Confederación, "queremos que ese llamado se transforme en conductas concretas, acciones concretas, de comunidades, autoridades, gobiernos y empresas. A nivel nacional hace tres años, por mandato de la Conferencia Episcopal, elaboramos el documento “Florecerá el Desierto”, que recoge un diagnóstico de las dificultades y conflictos ambientales, apelando a la búsqueda de una desarrollo humano integral, señaló Figueroa.
Finalmente, el Director de la Pastoral Social Caritas destacó que “el llamado que queremos hacer es a acoger la encíclica desde la urgencia de actuar, pero teniendo una mirada de esperanza (…) No todo esta perdido, a pesar de lo agobiante que son los problemas medioambientales que enfrentamos. Me atrevo a proponer un nuevo estilo de vida, de consumo y producción. No todo está perdido, como nunca antes en la historia el destino común nos hace una llamado a buscar un nuevo comienzo”, es posible un cambio aún, concluyó Figueroa.
La presentación de la Encíclica “Laudato si”, concluyó con un testimonio dado por la Hna. Cristina Hoar, de la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (CONFERRE), quien contó su experiencia de trabajo en materia medioambiental junto a las comunidades de El Tránsito, en la comuna de Alto del Carmen, región de Atacama.